Desde el año pasado una farmacéutica israelita llamada Vaxil BioTherapeutics trabaja en el desarrollo de una vacuna que se prevé puede tratar prácticamente cualquier tipo de cáncer, y el enfoque que emplea es novedoso en el sentido de que va directamente a células específicas relacionadas al cáncer que se esté tratando, dejando intactas a células y tejido sano.
Justamente este es el problema de tratamientos más tradicionales, como la quimioterapia, donde no hay forma de diferenciar entre células cancerosas y normales, con la consecuencia de que el sistema inmunológico se resiente y empiezan a aparecer los efectos secundarios que todos conocemos: náuseas, pérdida del cabello, mareos y debilidad general.
La clave de la vacuna que desarrolla Vaxil reside en el hecho de que está formulada para entrenar al sistema inmunológico para que haga su trabajo específicamente sobre aquellas células que contienen la glicoproteína MUC1, la cual se ha determinado que está presente en el 90 por ciento de los cánceres, incluyendo los de próstata, mamas, intestinos, ovarios y páncreas. MUC1 tiene la particularidad de que los azúcares que la recubren le dan un aspecto particular que permite distinguirla con facilidad de otras proteínas.
Las pruebas de Vaxil en ratones con la vacuna, llamada ImMucin, fueron tan exitosas que ahora han pasado a la fase de pruebas en humanos. Actualmente hay 10 pacientes de mieloma múltiple -un tipo de cáncer de la sangre- que participan en el estudio, que se lleva a cabo en el Centro Médico Hadassah, en Jerusalén. De los 10 pacientes, 7 han terminado el tratamiento, y en este último grupo hay 3 pacientes que han sido declarados libres de cáncer. Quizás la mejor noticia es que ninguno de los pacientes reportó efectos secundarios de envergadura, solo una ligera irritación en el lugar donde fueron administradas las vacunas. De un máximo de 12 dosis, los efectos inmunológicos empezaron a observarse a partir de la segunda y cuarta dosis, según la situación de los pacientes.
ImMucin es una vacuna terapéutica en el sentido de que no está formulada para prevenir enfermedades, como es lo común, sino que su objetivo es habilitar y preparar al sistema inumológico para que ataque el cáncer de manera efectiva. A pesar de los resultados promisorios, Vaxil aún requiere completar vatrios años de pruebas para determinar qué tan efectiva y segura es la vacuna en humanos. Si todo sigue como va, se prevé que para 2020 ImMucin puede estar a la venta.