Si eres gamer seguramente llevas desde el fin de semana atento a la versión 2017 de E3, un evento anual que se concentra precisamente en videojuegos, desde diseño y concepción hasta avances tecnológicos y los equipos necesarios para su disfrute.
El evento, que arrancó durante el fin de semana pasado en el Centro de Convenciones de Los Angeles y pautado a finalizar mañana, reúne a compañías como Microsoft, Sony Entertainment y Nintendo, las cuales aprovechan el escenario para dar a conocer los nuevos juegos y consolas en los que han estado trabajando durante el último año.
Por supuesto, gamers y youtubers forman parte integral del público, y son de hecho los primeros en tener acceso a demostraciones privadas, regalos y la posibilidad de probar algunos de estos juegos antes de su salida al mercado.
Si bien es cierto que en esta versión 2017 de E3 se han mostrado algunos juegos y productos que llaman la atención, las expectativas, al menos desde mi punto de vista, no han sido totalmente satisfechas, y de eso han dado cuenta algunos presentes y seguidores en línea que no han dudado en externar y hacer pública su decepción.
A esta versión de E3 le faltó la conexión que normalmente se da con el público, y ni hablar de esos momentos memorables en los que tanto espectadores presenciales como online expresan júbilo ante los nuevos títulos que suelen presentarse en este escenario: esos han brillado por su ausencia.
E3 este año se ha sentido como un gran reciclado del año anterior, dejando de paso un mal sabor. En años anteriores Sony y su Playstation solían robarse el show, pero en esta ocasión decepcionaron a más de uno. Extrañamente ha sido Microsoft una de las empresas que mejores reacciones ha provocado entre el público, gracias a la increíble cantidad de juegos que mostraron en su presentación.
Quisiera pensar que Sony Entertainment está trabajando con proyectos tan secretos y llamativos que no quiere que nadie los vea, proyectos que pudieran dar un giro a lo que yo llamo una desastrosa exposición.
Este E3 trae a la mesa una situación que se da en muchas compañías, y es que estas se sienten cómodas y se duermen en sus laureles porque poseen grandes títulos. Es el caso de Electronic Arts, que no presentó nada nuevo en esta ocasión, y de Bethesda también. Se sobreentiende que estas compañías deben mantener una estabilidad pero están llegando a un punto en el cual ciertos jugadores se están cansando de lo mismo.
Todo es una copia de todo y la originalidad está desapareciendo poco a poco. Yo espero que estas compañías aprendan del gran error que ha sido E3 2017, donde no solo no atrajeron al público que esperaban, sino que tampoco satisfacieron el anhelo del mismo: nuevos juegos, no copias ni reciclaje de lo ya existente.
Sinceramente, si se sigue este camino, la industria del videojuego está llamada a desaparecer eventualmente. Llegará un momento en el que todo será lo mismo, solo que con diferente tamaño, como ocurre actualmente con Apple.