Para nadie es secreto que vivimos tiempos de cambios muy acelerados que se reflejan no sólo en nuevos paradigmas, sino también en una disrupción que está dando al traste con la manera tradicional de ofrecer servicios y hacer cualquier cosa en términos generales.
Estos cambios, impulsados por la Internet y el consecuente desarrollo de toda una cultura digital y virtual que ahora es aprovechada y explotada por smartphones, wearables y hasta electrodomésticos -siempre que estén conectados- tienen su origen en algo que se genera espontáneamente cada día: data, la cual es transformada en información a través de análisis y estudios.
Cierto es que la data, y por ende la información, existe desde el principio de los tiempos, pero ahora, por vía de máquinas más sofisticadas y poderosos avances en procesamiento, esta se genera a una velocidad inusitada y a volúmenes que hace 50 años o menos eran inimaginables.
La data es ahora nuestro activo más valioso -no en vano se le llama a esta la “era de la información”- y esto es algo que está a la vista en el explosivo crecimiento de las redes sociales y los cambios que se dan a nivel de IoT en base precisamente a data recolectada y utilizada de manera inteligente para la conformación de hogares y ciudades inteligentes.
Cabe preguntarse qué tan bien se está usando toda esta información que se genera en el mundo día tras día. Es una pregunta válida a nivel tanto individual como colectivo, gubernamental y organizacional.
La respuesta es una que varía según muchas circunstancias. Hay organizaciones y países que están claros en la importancia de saber recolectar, almacenar y utilizar correctamente la data; otros simplemente no tienen esa cultura, con la consecuencia de que se pierden de un valioso activo.
En respuesta a esta necesidad creciente de almacenar y gestionar el mar de información que se genera a partir de toda esa data individual ha surgido una tendencia conocida como “gobernabilidad de la información”, término que hace referencia a manejo estratégico tendente a maximizar el valor de la información a la vez que mitiga los riesgos asociados a crearla, usarla y compartirla. Este concepto aplica a cualquier organización, sea privada, pública o sin fines de lucro.
Conversatorio HUB Cámara Santo Domingo 2018
En el caso de las compañías, por ejemplo, la información resultante de data recolectada a través del tiempo podría dar lugar a la implementación de nuevos modelos de negocios que optimicen la productividad y funcionamiento. Una buena gestión es, por ende, más que necesaria: es prácticamente una obligación.
El tema de la gobernabilidad de la información fue motivo de un conversatorio a propósito de la tercera edición del HUB de la Cámara de Comercio de Santo Domingo, contándose con la experiencia de Kio Networks y Bunker, ambos proveedores de soluciones de administración de la información en la República Dominicana.
Erika Lazzarin, directora comercial de KIO Networks para la República Dominicana, recomienda a las compañías estar conscientes de la importancia de resguardar y proteger su información para ser más productivas y competitivas y así ofrecer mejores servicios.
Los representantes de Bunker, por su parte, indicaron que las amenazas relacionadas a la gestión de la información son más comunes de lo que se piensa. Mientras más grande una compañía, más retos y desafíos enfrenta por este lado.
