La nube está en todas partes, y más ahora que las empresas de todo el mundo viven un proceso acelerado de transformación digital.
Son muchas las cosas que se pueden hacer en la nube, desde gestión de procesos hasta almacenamiento y respaldos críticos.
Una de las tecnologías aliadas para gestionar aplicaciones en la nube es Kubernetes, una plataforma de fuente abierta que facilita el desarrollo de aplicaciones bajo la arquitectura de contenedores.
Esta tecnología, también conocida como k8s o “kube”, automatiza muchos de los procesos manuales involucrados en la implementación, la gestión y el ajuste de las aplicaciones que se alojan en ellos.
Haiver Galeano, arquitecto de soluciones senior de Red Hat para Centroamérica y el Caribe, indica que la principal ventaja de usar Kubernetes en una empresa es que se obtiene una plataforma para programar y ejecutar los contenedores en clústeres de máquinas virtuales o físicas.
Kubernetes alcanza una flexibilidad que no logran otras plataformas de gestión estándar debido a que en ocasiones no encajan con las versiones entre servidores o requieren una migración entre tecnologías previa a la gestión, lo cual puede complicar y ralentizar el proceso.
Galeano ofrece un ejemplo práctico de un escenario donde Kubernete facilita las cosas: actualizaciones de aplicaciones en contenedores.
Realizar la actualización manual de una o varias aplicaciones en contenedores puede ser un proceso extenso y complicado. Por ejemplo, para implementar la versión más reciente de un servicio dentro de la compañía, se debe iniciar la nueva versión de dicha aplicación, detener la anterior, esperar y verificar que la nueva versión funcione correctamente y, finalmente, usarla. No obstante, en caso de que haya algún problema, puede que sea necesario regresar a la antigua versión.
Llevar a cabo este proceso de modo manual y escribir los scripts adecuados incrementa las probabilidades de que ocurran errores humanos. Incluso, si las dificultades persisten, esta labor podría repetirse una y otra vez obstaculizando el lanzamiento y el uso de la nueva versión.
Este procedimiento se vuelve automático y repetible con las implementaciones de Kubernetes. A continuación, una lista de lo que puede hacer la tecnología:
- Organizar los contenedores en varios hosts.
- Hacer un mejor uso del hardware para aprovechar al máximo los recursos necesarios en la ejecución de las aplicaciones empresariales
- Controlar y automatizar las implementaciones y actualizaciones de las aplicaciones.
- Agregar almacenamiento para ejecutar aplicaciones con estado.
- Deducir el ciclo de vida de una aplicación.
- Ampliar las aplicaciones en contenedores y sus recursos según sea necesario.
- Realizar comprobaciones de estado y autorregeneraciones de sus aplicaciones con ubicación, reinicio, replicación y adaptación automáticos.