¿Se acuerdan de Nokia? Días atrás se reportaba en varios medios que esta marca, licenciada desde 2016 a la finlandesa HMD Global, dejará de circular.
¿El fin de una era? No necesariamente. Al menos por ahora, HMD asegura que los teléfonos Nokia seguirán saliendo al mercado, coexistiendo con los teléfonos HMD Originals que ese fabricante anunció en septiembre pasado.
Esta decisión de HMD sacar al mercado sus propios teléfonos bajo su propio nombre no llamó tanto la atención hasta que empezaron a cambiarse los nombres de los canales de la compañía de Nokia Mobile a HMD iniciando el mes de febrero.
Varios medios interpretaron el cambio como una señal del inminente fin de Nokia, una marca que llegó a ser líder mundial en ventas en 1998 y que mantuvo un fuerte dominio hasta finales de la década del 2000.
La llegada del iPhone en 2007, y con ello el afianzamiento del concepto de smartphone, fue uno de varios acontencimientos que impactaron negativamente a Nokia, que no supo responder a tiempo a la tendencia emergente. Situación similar ocurrió con BlackBerry.
En la era post-iPhone, Nokia es un nombre que evoca nostalgia, manteniendo su fama de ser un fabricante de teléfonos no solo resistentes, sino de larga duración a nivel de batería y reconocido por juegos tan icónicos como Snake y otras innovaciones.
No fue sino hasta 2011 que Nokia hizo entrada al mercado de smartphones con el modelo Lumia 800, que corría en la plataforma Windows Phone. Eventualmente, Microsoft compró la división de móviles de Nokia, pero la vendió a HMD en 2016 tras descontinuar Windows Phone en 2015.
Bajo HMD, los teléfonos Nokia son conocidos por ser sostenibles y asequibles, con un alto nivel de reparabilidad que es inexistente en marcas como Apple.
Quizás como muestra de que los teléfonos Nokia no serán enterrados de inmediato, HMD reintrodujo este 6 de febrero el modelo Nokia G22 en un nuevo color: durazno.
