¿Te encantan los bizcochos pero no tienes idea de cómo hacer uno? ¿La vez que intentaste sorprender a tu familia con cupcakes caseros resultó en un desastre? Si eres de la gente que prefiere no acercarse por una cocina, o bien de los que aprecian todas las ideas orientadas a ahorrar tiempo, entonces el último invento en ser presentado por un par de estudiantes de Harvard es para ti: bizcocho en aerosol.
Se trata de una idea presentada inicialmente por John McCallum como proyecto final de su clase de Ciencia y Cocina en Harvard. La inspiración fue una repostera que dio una lectura acerca de cómo suben los bizcochos mientras se hornean, conocimiento que fue posteriormente aplicado al mecanismo presente en latas de crema batida en aerosol, utilizadas comúnmente para dar los toques finales a bebidas a base de café y tartas de postre. El resultado, perfeccionado en el último año junto a Brooke Nowakowski, es algo sencillamente denominado Spray Cake.
Tal como indica su nombre, y siguiendo con la premisa, con Spray Cake tan solo debe dispensarse la mezcla en un recipiente adecuado y poner al microondas por no más de un minuto. Por supuesto, puede también usarse un horno convencional, quizás con resultados más atractivos en cuanto a estética. Esto es lo que se llama bizcocho instantáneo, sin hacer mezclas, sin hacer tollos y sin pasar horas esperando a que suba la masa. Lo mejor de todo es hay cero frustraciones y un disfrute al momento.
Con Spray Cake la idea no es sustituir un buen bizcocho hecho a mano, con los pasos requeridos y el esmero que suelen poner los reposteros apasionados. Más bien se trata de una alternativa a esas mezclas que vienen empacadas, las cuales están disponibles en polvo para mezclar con agua, leche u otros ingredientes, o bien en forma semicompacta con un mínimo de instrucciones a seguir. Un punto a favor de este original invento es que se trata de un producto 100% natural, sin colorantes o sabores artificiales.
En un microondas toma 30 segundos hacer un cupcake, mientras que un bizcocho entero toma alrededor de un minuto. Una vez cocinado, Spray Cake presenta la misma contextura y aspecto de un bizcocho estándar. McCallum y Nowakowski están en proceso de patentar su idea, la primera en su clase.