¿Te entusiasma la idea de una colonia humana en Marte, tal como la desea establecer el holandés Bas Lansdorp a través de Mars One? Quizás la vida en la Tierra, con tantas guerras, hambre, miseria, escasez e injusticias, ya no resulte tan atractiva, pero una cosa es segura: nada le gana a este planeta en cuanto a condiciones para la vida, sea humana o de otro tipo.
Resulta, según concluyó recientemente el Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), que hay numerosos riesgos asociados a esta misión, que pretende colocar a los primeros humanos en el planeta rojo hacia 2024 con la ayuda de cápsulas de SpaceX (aún pendiente de aprobación) y voluntarios que ya fueron seleccionados.
El plan, que además de ambicioso pudiera ser calificado como algo totalmente descabellado por los menos ingenuos, implica que la gente se establezca en unidades inflables habilitadas con lo necesario para producir alimentos y convivir con los demás voluntarios. A todo esto, los colonizadores serán sometidos rutinariamente a una serie de pruebas y experimentos para determinar como el cuerpo humano se adapta a un ambiente tan distinto al del planeta Tierra. Como a la gente le gusta inventar, el plan en Indiegogo recaudó la nada despreciable suma de 313,744 dólares, por debajo de su meta de 400,000 pero lo suficiente como para mantenerse el proyecto con vida.
Los riesgos
Para alguna gente la idea de vivir en Marte resulta atractiva. Después de todo, a mayo de este año Mars One informó que contaba con 705 posibles colonizadores, escogidos de entre más de 1,000 voluntarios. A pesar de que sería la excusa perfecta para dejar atrás los problemas mundanos, el MIT advierte que la misión está tan plagada de errores, en base a los planes desplegados, que no habría forma de sobrevivir más que un par de meses.
Uno de los principales problemas, según las conclusiones del MIT, tiene que ver con la cosecha de comida: esta actividad generaría una cantidad considerable de oxígeno, lo cual a su vez crearía ambientes altamente inflamables, en riesgo de explotar en cualquier momento. La solución sería desarrollar algún mecanismo que extraiga oxígeno pero que mantenga las condiciones de nitrógeno hasta quedar a niveles tolerables. Señala el estudio que esa tecnología aún no existe.
Hablando de comida, MIT señala que los primeros colonizadores probablemente no contarán con la suficiente cantidad de alimentos, lo que representa un riesgo de morir de inanición. Además, está la cuestión de que toma nueves meses viajar de la Tierra a Marte, lo que significa que cualquier emergencia a nivel de repuestos no podrá ser atendida debidamente.
Marte tiene una temperatura promedio de -65 Cº y una atmósfera sumamente delgada compuesta en su mayor parte por dióxido de carbono. En pocas palabras, un ambiente letal para cualquier forma de vida tal como la conocemos en la Tierra, por tanto cualquiera lo pensaría dos veces para establecerse allí. Tomar en cuenta los hallazgos del MIT, aún cuando propone algunas alternativas para reducir los riesgos, equivaldría a dejar la misión, pero eso no está en los planes de Bas Lansdorp, quien los ha refutado al decir que ha contado con asesoría de excelentes científicos.
¿Será posible establecer una colonia humana en Marte? El tiempo se encargará de decirlo. Mientras, no parece ser la mejor idea.