Aunque vivimos en un país que hasta 2009 no conocía las bondades de transporte masivo y organizado, donde todavía a los carros de concho se les permite andar sin luces y contaminando como chimeneas ambulantes, no está de más hablar acerca de la tendencia verde en automóviles y las nuevas propuestas en ese sentido. Desde finales de la década de 1990 se viene hablando de vehículos híbridos, un concepto que combina sistemas tradicionales de motor de combustión con alternativas más limpias, como electricidad. Fue el caso de Prius, lanzado por Toyota en 1997 y considerado uno de los carros más limpios disponibles en Estados Unidos.
17 años después de haber debutado con su primer híbrido, impulsado por una combinación de gasolina y electricidad, Toyota evoluciona más allá del concepto al introducir Mirai, un vehículo totalmente impulsado por hidrógeno, un elemento abundante en la naturaleza, poco contaminante, pero cuya extracción representaba hasta hace unos años un reto a nivel de costo-beneficio. Tras haber solucionado este obstáculo, la compañía ahora enfrenta otros, sobre todo el lado de suplir un combustible que es totalmente diferente a la gasolina y otros derivados del petróleo.
Con el hidrógeno, implementado en Mirai con la tecnología de celdas de combustible, en desarrollo desde hace algunas décadas, pasa algo similar que con el gas natural: requiere de sus propias estaciones, y eso al principio tiene un impacto sobre su adopción. Sin embargo, los beneficios, sobre todo a nivel medioambiental, lucen prometedores. Mirai es un vehículo de cero emisiones, que solo genera vapor de agua, y esa es la meta a alcanzar si se quieren parar y/o revertir los efectos del calentamiento global.
Consciente de la situación, y por aquello de que alguien debe dar el primer paso, Toyota ha entrado en alianzas con California y algunos estados del noreste de los Estados Unidos, donde el vehículo será lanzado en 2015. La idea es que en esos lugares haya la infraestructura necesaria, es decir, estaciones, para dar soporte el soporte cuando empiecen a venderse los Mirai. Es un primer paso costoso, pero necesario: en California, por ejemplo, la idea es instalar 48 estaciones de hidrógeno de aquí a 2016, financiadas en parte con un préstamo de 7.3 millones de dólares otorgado por Toyota.
Las ventas de Mirai arrancan este 15 de diciembre en Japón. Para mediados de 2015 está pautada su disponibilidad en California, donde se venderá el vehículo en 57,500 dólares. Para ese momento el plan es que haya 23 estaciones de hidrógeno en funcionamiento. Para septiembre 2015 se contempla la disponibilidad de Mirai en Reino Unido, Alemania y Dinamarca. En total Toyota contempla 700 unidades de Mirai para 2015, 200 de las cuales están destinadas al mercado estadounidense.
¿Qué impacto tendrá Mirai? Aunque los beneficios son obvios por el lado medioambiental, acostumbrarse a lo nuevo toma tiempo, por tanto queda en veremos.