¿Te pasas el día mirando la pantalla de tu smartphone, incluso mientras trabajas, caminas o compartes con amistades?
La realidad es que no estás solo: este comportamiento es demasiado normal, tanto que se han implementado mecanismos para evitar la fatiga visual y para limitar el uso de smartphone en general por aquello de que necesitamos un balance en nuestras vidas.
El atractivo de la pantalla del smartphone y su incesante desfile de notificaciones, posteos en redes sociales y videojuegos es algo que impacta de muchas maneras, y es por eso que se apuesta desde hace unos años a un futuro donde el smartphone podría ser sustituido por un dispositivo sin pantalla.
Siempre se ha hablado de gafas de realidad aumentada como posible sustituto, siendo la idea aprovechar el campo visual del usuario para mostrar información puntual en el momento preciso en que esta sea requerida.
Finalizando 2023, sin embargo, ha salido un dispositivo que carece de pantalla pero que hace muchas de las funciones de un smartphone. ¿Será este el sustituto que se viene pensando? Veamos de qué trata.
El dispositivo en cuestión, AI Pin, es una propuesta de Humane, una startup fundada por exempleados de Apple que se enfoca en desarrollar productos tecnológicos que mejoren la experiencia humana al tiempo que permitan al usuario reconectar con ellos mismos y su entorno.
Al carecer de pantalla, AI Pin cumple con reducir a un mínimo las distracciones, intercambiado la interfaz visual por una que funciona con comandos de voz y gestos.
Sin duda alguna, AI Pin es un gadget curioso, sobre todo porque, a pesar de sus diminutas dimensiones (44.5 mm. de ancho, 47.5 mm. de largo y 34 gramos de peso, sin contar el refuerzo de batería, que se añade en la parte trasera), integra cámara y proyector.
La cámara, de 13 megapíxeles, de momento sirve para tomar fotos. Próximamente, tras una actualización a su sistema operativo, Cosmos, podrá hacer video igualmente.
Además de tomar fotos, la cámara sirve para presentar elementos a AI Pin y hacer preguntas, las cuales serán respondidas por vía de la inteligencia artificial, gracias a su integración con OpenAI.
El proyector, por su parte, sirve para convertir la palma de la mano en una pantalla temporal -una idea que en realidad no es nueva-, pudiéndose seleccionar comandos con algunos gestos realizados con los dedos.
AI Pin está supuesto a ser llevado -justamente- como un alfiler o pin en la camisa o la chaqueta, siempre listo para responder preguntas, traducir e interactuar de otras maneras con el usuario.
Aquí, a diferencia de un smartphone, no hay aplicaciones: al hacer una pregunta o petición a AI Pin, se dirigirá al usuario al conjunto de herramientas que más le sirvan en ese momento.
Partiendo de este enfoque, la influencia de ChatGPT en el diseño de AI Pin queda muy clara, y es, posiblemente, un indicio de hacia donde podrían dirigirse los dispositivos en un futuro no tan lejano
Ahora bien, ¿valdría la pena? El precio de AI Pin es 699 dólares, pero a eso hay que sumar una suscripción mensual de 24 dólares para gozar del acceso a esas facilidades de inteligencia artificial. Esta suscripción, a través de una versión personalizada de T-Mobile para Humane, incluye un número de teléfono y data celular.
Futurista e interesante, sin duda, pero queda en el aire la pregunta de si realmente acaparará la atención de un público que no solo está muy acostumbrado a sus smartphones, sino que, posiblemente, no esté dispuesto a gastar su dinero en algo que está en etapa experimental.
Las preórdenes de AI Pin arrancan el 16 de noviembre para Estados Unidos. ¿Será un éxito esta propuesta? ¿Dejarías tu smartphone por este dispositivo? Deja tu opinión en la sección de comentarios.
