En los cinco meses que lleva el mundo en pandemia son muchos los eventos que han sido pospuestos, cancelados o llevados al plano digital para así cumplir con los protocolos de distanciamiento social que exige la situación.
El panorama descrito más arriba se ha visto en deportes, cine, turismo, entretenimiento y, por supuesto, tecnología, donde el festival comenzó con el Mobile World Congress (MWC) que todos los años -menos este- se lleva a cabo en Barcelona, España.
MWC 2020 no se celebró de ninguna forma, optando los organizadores por posponerlo hasta 2021. Otros eventos, entre ellos el lanzamiento de Huawei P40, Red Hat Summit, WWDC 2020 de Apple y la presentación de juegos para PlayStation 5, se han llevado cabo online
Aunque se pensaba que esto de la pandemia sería algo temporal y que más pronto que tarde las cosas volverían a la normalidad, la realidad que enfrenta el mundo es otra: COVID-19 no da muestras de ceder, y por ello es de esperarse que por lo que resta del año -y sin saber realmente hasta cuando- sigamos trabajando desde casa y evitando el contacto social, con todas las consecuencias que ello implica.
2021 no es que pinte muy diferente, y para muestra de ello se anunció esta semana que CES 2021, muy a pesar de los planes que sus organizadores tenían, será un evento enteramente digital.
CES, las siglas de Consumer Electronics Show, es un evento que se caracteriza por atraer gran cantidad de público, incluyendo espectadores, medios, emprendedores, grandes compañías y, por supuesto, expositores de todo tamaño y calibre que buscan sacar provecho al ambiente y su energía para darse a conocer y hacer negocios.
Gran parte del atractivo del CES consiste en ir a Las Vegas y presenciar de primera mano lo que los propios organizadores definen con la innovación que definirá el futuro inmediato. Se trata de 3-4 días llenos de expectativas, presentaciones, conferencias, lanzamientos y encuentros que se dan en diferentes puntos de Las Vegas, todo complementado por fiestas, cócteles, eventos sociales y la oportunidad de compartir con miembros de la industria y hasta de explorar oportunidades de negocios y promocionar países como opciones tecnológicas a explorar.
Tratándose de un evento enteramente digital, nada de esto será posible en CES 2021, y mejor que nos acostumbremos, pues fácilmente lo virtual y digital se conviertan en la norma de ahora en adelante.
Por supuesto, no todo es malo: CES 2021 en formato virtual ofrece la ventaja de que no hay que gastar dinero en pasaje y hospedaje ni hacer largas filas o caminar distancias kilométricas de un punto a otro. Asimismo, hay una apertura al público que hace del evento algo más inclusivo.
Bajo las actuales circunstancias las videollamadas, el correo electrónico y las redes sociales son nuestros mejores aliados para continuar innovando y produciendo. CES 2021 ofrece una buena oportunidad de poner a prueba las bondades de toda esa tecnología que por allá ha querido venderse como solución práctica de conectividad, negocios y socialización.
¿Logrará CES 2021 superar las expectativas y demostrar que los encuentros virtuales pueden ser tan satisfactorios o más que los presenciales? La respuesta la obtendremos en la primera semana de enero 2021.
