¿Se acuerdan de Sam Bankman-Fried (SBF) y FTX? Ahora es que falta por desenmascarar.
Para quienes no lo recuerdan, FTX era el segundo mayor criptointercambio, solo superado por Binance. En noviembre pasado cayó espectacularmente, arrastrando a su fundador y CEO -el ahora infame SBF- y a sus más cercanos colaboradores a enfrentar la justicia.
Una serie de acusaciones, desde fraude electrónico y conspiración para cometer fraude de valores hasta lavado de activos e intento de soborno a funcionarios chinos, pesan contra SBF, cuyo juicio está próximo a empezar.
SBF fue arrestado en diciembre pasado en Bahamas, de donde pasó a una prisión y luego a arresto domiciliario tras pagar una fianza de 250 millones de dólares. En agosto de este año, tras un juez revocar dicha fianza por entender que el acusado estaba influenciando o intimidando a testigos, volvió tras las rejas.
Ahora que se acerca el juicio, donde se prevé sus más cercanos colaboradores testificarán en su contra para demostrar cómo se hizo uno de los más grandes castillos de naipes, un elemento adicional sale a relucir: sus padres también están siendo demandados.
SBF es hijo de dos reconocidos profesores de la Universidad de Stanford, Joe Bankman y Barbara Fried, ambos ligados a la escuela de derecho de esa institución.
Resulta que este par no solo se benefició de FTX, sino que contribuyó a desviar una parte considerable del dinero que hoy ese criptointercambio debe a quienes se quedaron enganchados con su colapso.
El dinero fue desviado de varias maneras, desde exigencias salariales injustificadas hasta la adquisición de una millonaria propiedad en Bahamas, con decoración y arreglos igualmente millonarios.
Se señala, asimismo, que la pareja de esposos realizó donaciones políticas y de caridad usando los fondos de FTX, aun a sabiendas de que eso estaba prácticamente quebrado-
Hubo incluso un regalo de 10 millones de dólares de parte de SBF a sus padres provenientes de Alameda Research, un fondo de inversión de activos digitales que llegó a hacer las veces de banco interno para mantener a flote las operaciones de FTX tras ser financiada con los tokens de FTX.
Y como las marrullas no vienen solas, también se acusa a Joe Bankman de participar directamente en esfuerzos por tapar una acusación que revelaría la fragilidad de FTX en 2019, el mismo año en que este criptointercambio fue fundado.
Esta familia es todo un dechado de virtudes, según dejan entrever sus acciones, y eso explicaría por qué SBF estaba listo para echar la culpa de todo a Caroline Ellison, su ex pareja y CEO de Alameda Research.
No es coincidencia que las notas personales de esta joven se consideren pieza clave en este juicio, pautado a iniciar el 1 de octubre.
