Pocas cosas son tan desagradables como usar ropa húmeda porque no había otra opción. Ocurre cuando se está de viaje, cuando hay prisa o cuando hay descuidos e imprevistos. Para estos casos lo ideal sería un secado rápido y efectivo, y eso promete Matthew Corry con Dry-Go.
Dos planchas -una de ellas con agujeros- que integran material de calentamiento por resistencia son la clave de Dry-Go, un proyecto inspirado en los viajes del propio Matthew por el sureste de Asia, donde en más de una ocasión, según relata en su campaña de crowdfunding, tuvo que elegir entre usar ropa sucia o húmeda.
Dry-Go es un aparato liviano y delgado, aproximadamente del tamaño de una hoja A3. El diseño final está previsto a tener un peso de 400 gramos y 6 milímetros de altura. Asimismo se contempla agregar asa en la parte superior para facilitar el manejo, un dial de temperatura y puerto USB para ofrecer una alternativa de carga a la electricidad.
Usarlo es sumamente fácil: tan solo se coloca la pieza de ropa que se desea secar entre las dos planchas, y listo. El calor concentrado y el aire que entra por los agujeros de la parte superior se encargan de evaporar el agua en apenas un minuto.
Por su tamaño y facilidad de uso Dry-Go resulta idea para secar calcetines, camisetas y ropa interior en general. Para quienes salen de viaje con frecuencia este aparato sería el complemento ideal de Dolfi, una solución portátil para lavar la ropa.
¿Veremos Dry-Go próximamente en el mercado? La idea es buena, pero la campaña de crowdfunding, que está próximo a finalizar, apenas ha recaudado la mitad de su meta de 10,000 dólares australianos (alrededor de 6,800 dólares) en Kickstarter. Sin embargo, muchos proyectos se cambian de plataforma o relanzan su campaña para dar continuidad, o simplemente buscan un socio que les financie, por tanto es cuestión de esperar. La buena noticia, mientras tanto, es que secar ropa en un minuto es posible. A ver si alguien más se anima.