Si eres gamer, y además formas parte de los 350 millones de jugadores de Fortnite, ya sabes que hay un lío feo desde la semana pasada entre Epic Games, desarrolladores del juego, y dos compañías que recientemente se han visto envueltas en una investigación de prácticas anticompetitivas dentro y fuera de Estados Unidos: Apple y Google.
¿Qué está pasando? A simple vista, lo de Epic Games podría verse como una acción revolucionaria, con algún dejo del Tea Party original ocurrido en 1773, ya que se trata de desafiar a dos compañías grandes e importantes en el tema de juegos móviles y, a la vez, ofrecer opciones atractivas a un público que está ajeno a lo que se mueve a lo interno de esta industria.
El motivo del espectáculo montado por Epic Games, que hasta incluyó un video parodia del icónico anuncio “1984” de Apple, es protestar la ahora infame comisión de 30 por ciento que cobran las plataformas -en este caso, las tiendas de aplicaciones- sobre ventas de artículos digitales realizadas dentro de una aplicación específica.
Ese 30 por ciento ha sido protestado infinidad de veces, presentándose incluso como un obstáculo a la innovación y como una práctica anticompetitiva que limita las ganancias de desarrolladores y distribuidores. Quizás lo más curioso del caso es que no se trata de un invento o imposición de Apple o Google, sino que este honorario tiene su origen en la década de 1980, cuando Pac-Man era el juego de moda y Nintendo la plataforma donde estar.
El porcentaje que hoy se discute y se presenta como una medida abusiva para desarrolladores, distribuidores y jugadores en general, es una herencia de Namco, creador de Pac-Man, y Hudson Soft Co. (creador de Bomberman) al entrar en negociaciones con Nintendo para permitir la entrada de Pac-Man y otros juegos a su consola. El 30 por ciento estaba dividido en dos partidas: un 10 por ciento de comisión por licenciamiento y un 20 por ciento por la fabricación de cartuchos de juego por parte de Nintendo, ya que Hudson no contaba con las condiciones para esa manufactura.
Es evidente que las cosas han cambiado en el terreno de juegos en estos 40 años, y es justo preguntarse por qué se mantiene ese 30 por ciento en una época donde la nube se presenta como alternativa, lo mismo que streaming y plataformas que se hacen cada vez más móviles (Nintendo Switch) hasta llegar a la idea de simplemente jugar en el smartphone, con teléfonos cada vez más especializados para los fines.
A cambio de ese 30 por ciento, que obviamente representa un ingreso para Apple, Google, Microsoft, Sony y cualquier otra plataforma que lo cobre (son todas, es como un estándar), se ofrecen mantenimiento, licencias, seguridad y otras facilidades y servicios que asegurarían una experiencia óptima para todas las partes involucradas.
Todos aspiramos a honorarios más bajos donde quiera que se maneje este concepto, y el mejor ejemplo de eso son los bancos, pero, ¿estuvo bien lo que hizo Epic Games?
Desde el punto de vista de que adrede violó los lineamientos de las tiendas de aplicaciones de Apple y Google al ofrecer un descuento sobre su moneda, V-Bucks, solo si se hacía la compra a través de los mecanismos de pago de Epic Games, podría decirse que la acción fue malintencionada y premeditada. Muestra de ello es que, tras anunciarse la remoción del juego de ambas tiendas, Epic Games procedió a demandar a Apple y Google. Cabe preguntarse, ¿por qué no hizo lo mismo con las demás plataformas que cobran el famoso 30 por ciento?
Aún cuando las acciones de Epic Games no fueron inocentes -resaltándose que no se trata de ningún Robin Hood, pues esta compañía tiene sus ambiciones, demostradas desde que Fortnite llegó a escena-, una cosa es casi segura: el panorama de los videojuegos, plataformas y demás puede estar a punto de cambiar.
Pocos se atreven a desafiar a Apple o a Google, y Epic Games lo ha hecho con un estilo impecable y llamativo, con el resultado de que muchos están a su favor. Del otro lado se encuentran Apple y Google, crecientemente vistas como el enemigo por el poder y dominio que han ido amasando a lo largo de los años.
Al final de esta batalla épica, que podría extenderse por largo tiempo, probablemente haya una reducción unánime del 30 por ciento de comisión, lo cual facilitaría la entrada de nuevos desarrolladores y distribuidores a escena.
Ustedes, ¿qué opinan? ¿Les afecta que Fortnite no esté disponible en Apple App Store o en Google Play? ¿Están de acuerdo con Epic Games? Dejen saber su parecer en la sección de comentarios.