En un mundo dominado por la tecnología, en el que dependemos de computadoras, aplicaciones e internet para aumentar la eficiencia de los procesos, un centro de datos resulta una pieza clave a nivel de negocios. ¿Cómo sacarle el mejor provecho? Schneider Electric comparte algunos consejos al respecto.
- Los centros de datos, al concentrar los recursos necesarios para procesamiento de la información a lo interno de la organización, optimizan el entorno de trabajo, minimizan riesgos y ofrecen la flexibilidad y agilidad necesarias para obtener resultados. El primer paso para una gestión adecuada es entender que hay componentes vitales cuya provisión individual determinará el crecimiento presente y futuro de todo el conjunto.
- Leopoldo Ruiz, vicepresidente de la unidad de IT para Schneider Electric México y Centroamérica, explica que entre los principales elementos se cuentan la seguridad tanto física como lógica de la información, tema que marca la diferencia en cuanto a calidad del servicio, así como la provisión de energía para que el centro pueda funcionar sin interrupciones todos los días del año.
- Un conjunto de elementos conocidos como HVAC, las siglas en inglés de calefacción, ventilación y aire acondicionado, hacen referencia a las condiciones que permiten mantener los servidores, procesadores, sistemas de almacenamiento, unidades de respaldo de energía y demás equipos en las condiciones de humedad, aireación y temperatura óptimos.
- También es importante definir la ubicación del centro de datos. Este punto es vital para definir su alcance e incluso su capacidad de respuesta para los usuarios de la información. De este punto, derivan cuestiones como la conectividad y la capacidad de crecimiento o expansión tanto en componentes del centro de datos como de servicios ofrecidos.
¿Cómo adaptar un centro de datos según la dimensión de la empresa? El primer paso aquí es analizar e identificar las necesidades informáticas. Un segundo paso es definir el tamaño que mejor se ajuste a la proyección de crecimiento.
Ruiz recuerda que el centro de datos es el cerebro de la empresa, donde se almacena la información, se procesan las transacciones e interacciones con cientes y proveedores, siendo este el lugar donde debemos ubicar nuestras aplicaciones de misión crítica presentes y futuras. De una buena inversión y una decisión crítica sobre como gestionamos esa información en un entorno adecuado, se puede también definir el crecimiento del negocio.