Entre íconos de diseño más intenso, nuevas formas de interacción por vía de Force Touch y la adición de nuevas funcionalidades de corte intuitivo, iOS 11 ofrece a usuarios iPhone una experiencia bastante diferente a la de recientes versiones anteriores del sistema operativo móvil de Apple.
De entrada, llama la atención que la interfaz parece tener profundidad, brindando una experiencia lo más cercana a lo 3D visualmente hablando. En el contexto de la realidad aumentada y el empuje que viene dando Apple a esta tecnología desde la conferencia WWDC en junio pasado, esta es un movida que hace sentido, ya que es una forma de motivar a su uso.
Enfoque en realidad aumentada
Pese a que la realidad aumentada lleva algún tiempo en existencia, llegando a hablarse extensivamente de ella a raíz de la locura colectiva que supuso Pokémon Go en su momento, hay gente que no sabe a ciencia cierta de qué se trata.
Básicamente la realidad aumentada es una tecnología que permite complementar el campo de visión -sea a través de una pantalla, lentes o cualquier otro dispositivo- con recursos adicionales que van desde data e información de interés hasta mapeos y elementos digitales, como es el caso de los famosos filtros de Snapchat e Instagram que añaden coronas, orejas, flores y demás a las caras de usuarios.
Uno de los usos más interesantes de realidad aumentada fue presentado por Phil Schiller durante el reciente lanzamiento de iPhone X/8/8 Plus: un mapa que muestra constelaciones en el cielo, con información adicional de interés y mostrando su ubicación correcta. Para amantes de la astronomía, este recurso será una oportunidad tanto de diversión como de aprendizaje.
La inclusión de capacidades de realidad aumentada es una de las principales características en iOS 11. A través de la plataforma ARKit irá aumentando la cantidad de aplicaciones compatibles con esta tecnología.
Nuevas formas de interacción con el iPhone
A nivel general la interfaz en iOS 11 luce diferente: aparte de la sensación de profundidad, hay cambios a nivel de algunos íconos, rediseñados con líneas más gruesas y redondeadas, extensivo a lo que ofrecen internamente.
Uno de los cambios más evidentes es el dock de aplicaciones y configuraciones de la parte interior de la pantalla, conocido también como centro de control. Este es el lugar donde normalmente tenemos acceso a linterna, wi-fi y otras funcionalidades que en teoría son las más usadas o buscadas.
Junto con el diseño nuevo, llamativo y sencillo a la vez, hay una facilidad de uso en lo que respecta a linterna, volumen de sonido e intensidad de brillo de pantalla que va por la vía de lo intuitivo. Hacer Force Touch -que no es más que pulsar duro sobre una función- presentará un menú adicional de opciones siempre que esté disponible. El usuario, a través del panel de configuración, tiene entera libertad de decidir cuales opciones van incluidas en el dock.
Uno de los cambios más llamativos tiene que ver con la toma de screenshots o pantallazos en el iPhone. Con iOS 11 la foto resultante se va a la esquina inferior izquierda de la pantalla, donde al pulsar sale todo un menú de opciones que permiten dibujar encima de la imagen, resaltar elementos, magnificar una porción y hasta añadir una firma personalizada. Al finalizar se tiene la opción de guardar la imagen resultante o bien eliminarla. Hacer Force Touch permite compartirla a través de redes sociales y correo.
Otros cambios
Nuevos filtros y mejoras a fotos “vivas” (live photos) forman parte de iOS 11. Con la actualización también se tiene una versión mejorada de Siri, con voz más natural, y una nueva aplicación de Archivo (File) para fácil gestión de documentos en la nube de cualquier equipo Apple sincronizado. Aplicaciones de terceros como Dropbox tienen acceso de primer nivel a esta parte para facilitar aún más las cosas.
En iOS 11 debuta igualmente la función “Do Not Disturb”, o “No Molestar”, que básicamente impide recibir notificaciones mientras se conduce para así evitar distracciones y posibles accidentes.
