Sensores y electrodomésticos capaces de autorregularse y comunicarse entre sí. Smartphone como centro de operaciones remotas. Tostadoras capaces de buscarse otro dueño en caso de sentirse subutilizadas. Esto y más será posible con Internet de las Cosas (IoT), un concepto que actualmente vemos en la práctica a un nivel limitado.
Por separado, y quizás con la excepción del ejemplo la tostadora, algunos de estos elementos no son del todo nuevos: sensores han existido desde hace años, lo mismo que sistemas automáticos que con uno o varios botones pueden controlarse remotamente, sin necesidad de actividad física por parte del usuario. La novedad aquí es que IoT unifica las cosas y las centraliza en un aparato omnipresente: el smartphone.
¿Cuáles son los beneficios del Internet de las Cosas? Ahora mismo es posible que el impacto no se vea tanto, pero algunos ejemplos bastan: te vas de viaje y con el smartphone puedes asegurarte en cuestión de minutos, incluso estando de camino, que todas tus luces estén apagadas y todas tus puertas cerradas. Por esa misma vía puedes asegurarte de que tus alarmas están debidamente instaladas y que en general no hay riesgo de robos o siniestros por algún descuido. ¡Qué alivio!, ¿no es así?
En la actualidad, sobre todo en países como República Dominicana, donde no hay aún las condiciones para que se masifique ese tipo de tecnologías, la forma de revisar estas cosas es manualmente. Si te das cuenta de que hubo un descuido, entonces tendrás que devolverte y retomar tu camino con cierto retraso.
Internet de las Cosas tiene muchas vertientes, pero al final el objetivo es uno solo: desarrollar un hogar tan inteligente que nunca más tendrás que preocuparte por revisar tus instalaciones físicamente. Los sensores -de movimiento, calor y otros- son una parte importante de la ecuación, lo mismo que cámaras que todo lo graban y conexiones Bluetooth y Wi-Fi que permiten la comunicación entre electrodomésticos y con el smartphone.
Por supuesto, IoT no se limita al hogar, y por eso se ven aplicaciones actualmente en hoteles y oficinas. El elemento común en cada escenario sigue siendo el smartphone, un aparato que con el tiempo seguirá evolucionando hacia algo más potente porque así lo demandan las circunstancias. Tan solo esperemos que con esa evolución mejoren las baterías, su punto más crítico en la actualidad.
Este asunto del Internet de las Cosas va tan en serio que la semana pasada, en el marco de IFA Berlín, Samsung presentó SmartThings Hub, una especie de centro de operaciones que puede conectar hasta 200 aparatos a la vez para su control a través del smartphone. A un precio de 99 dólares para el mercado estadounidense, esta propuesta de Samsung resulta atractiva, sobre todo porque convierte el hogar en inteligente al instante, sin necesidad de cables.
Antes de esta propuesta de Samsung ya se habían visto las incursiones de Google, que había comprado Nest e introdujo Brillo recientemente, y de Apple con su HomeKit. Del otro lado del mundo, en Dubai, existe Cogniliving, básicamente una solución de automatización del hogar que tampoco requiere cableado ni grandes inversiones. Al igual que el SmartThings Hub de Samsung, Cogniliving emplea tecnología Z-Wave para simplificar las cosas.
¿Veremos IoT aplicado algún día en República Dominicana y otros países del área? Aunque no tan común, hay servicios de domótica disponibles en el país, con aplicaciones sobre todo en condominios modernos, de reciente construcción, que van dirigidos a la clase alta de la sociedad. Como suele ocurrir, las grandes masas no tiene acceso inmediato a tanta innovación, pero, como todo, será cuestión tiempo.
Más que el posible alcance, el verdadero punto de preocupación de IoT yace en cuestiones de seguridad. En un mundo ideal sería maravilloso estar rodeados de tanta comodidad y automatización. En el mundo real, sin embargo, tenemos hackers acechando la menor oportunidad para hacer estragos. Y en el caso local, los apagones son otra constante a tomar en cuenta.
Si en Estados Unidos se vuelven locos con cualquier fallo eléctrico, ¿qué va a pasa cuando nada funcione porque se acabó la comunicación entre electrodomésticos?