Todos los caminos conducen hacia la inteligencia artificial, y prueba de ello es que las grandes cadenas de comida rápida están adoptando soluciones de este tipo para agilizar y optimizar el autoservicio.
¿Será la IA la solución más idónea en estos casos? Es un hecho que, en ocasiones, pedir la comida sin salir del vehículo, dizque para no perder tiempo, arroja el resultado contrario.
Las razones son variadas, y van desde sistemas de comunicación defectuosos hasta errores humanos, ya sea de quién tomó la orden o del que la ejecutó.
En teoría, un chatbot de inteligencia artificial, debidamente entrenado para comunicarse en lenguaje natural y adaptarse a los matices del habla de cada cual, podría poner fin a esas tediosas situaciones, pero no es tan blanco y negro el asunto.
La inteligencia artificial no es infalible, y si en algo puede fallar es en la parte de personalización de las órdenes. Después de todo, son muchos los clientes que modifican sus pedidos, ya sea por necesidad o preferencia.
Aun cuando esta es una posibilidad muy real, cadenas como Taco Bell y Pizza Hut, a través de Yum! Brands -grupo al que pertenecen- han decidido dar una oportunidad a la inteligencia artificial a este nivel, aliándose en el proceso a Nvidia.
¿Funcionará? A partir del segundo trimestre seremos testigos, pues la implementación de chatbots de IA se estará expandiendo, y es cuestión de tiempo que llegue hasta estos mercados.