Desde los efectos del dióxido de carbono en el aire hasta la incidencia de diabetes en ciertas poblaciones, en República Dominicana estamos acostumbrados a ver la recolección y uso de data en estudios que no solo muestran vínculos entre elementos sino que, además, contribuyen a la formación de comunidades inteligentes con ayuda de diversos avances tecnológicos.
Sueler ser que esos estudios, en su mayoría, al menos, vienen de fuera. Se caracterizan por ser continuos, muchas veces de larga duración -en ocasiones duran décadas- y por el uso de métodos científicos que hacen un aprovechamiento táctico de la data recolectada. La utilidad viene poco después de la presentación de resultados, ya sea en la forma de desarrollo de medicinas eficaces, en cambios a nivel legislativo o en la implementación de mecanismos de prevención.
República Dominicana es un país donde históricamente no se da importancia a la recolección de estadísticas y el análisis de las mismas, aún cuando se ha demostrado que su estudio puede ser en efecto muy útil. La mayoría de las investigaciones realizadas en territorio dominicano suelen ser iniciativas privadas, con un alto componente de presencia extranjera.
Cuestiones culturales y hasta de idiosincrasia intervienen en esta peculiar situación -que no es única de la RD, dicho sea de paso-, pero las cosas hace un tiempo están cambiando.
El Instituto Tecnológico de santo Domingo (INTEC), uno de las instituciones académicas más progresistas e innovadora en el país, ciertamente ha estado cultivando el amor por la investigación y el desarrollo dentro y fuera de sus instalaciones. De allí, producto del ingenio de sus estudiantes y asesoría de sus profesores, hemos visto iniciativas tan interesantes como las baldosas solares capaces de retener energía, mecanismos para detectar el nivel de madurez del zapote y un catalizador que fue patentado.
Para este 2018 INTEC tiene en carpeta una serie de proyectos de investigación que resultarán útiles en cuestiones de prevención de daños a infraestructuras -necesario porque la isla es vulnerable a terremotos y huracanes-, preservación de la biodiversidad e impulso de ciencias tradicionalmente rezagadas como es el caso de las matemáticas.
En total son 8 proyectos, sometidos al Fondo de Innovación y Desarrollo Científico y Tecnológico (FONDOCyT) del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología (Mescyt) fueron seleccionados para recibir financiamiento por más de RD$57 millones.
Un detalle de las investigaciones
Una de las investigaciones que liderará INTEC está orientada a desarrollar un nuevo método de análisis numérico no lineal del suelo para determinar cómo varían sus propiedades al ser sometido a terremotos de distintas magnitudes y demostrar cómo un mal análisis de suelo puede generar la vulnerabilidad de la estructura y su colapso.
El estudio abarcaría tres tipos de infraestructuras de Santo Domingo: hospitales, escuelas y edificios gubernamentales, y conllevaría una inversión de RD$9,433,308.94. La investigación estará dirigida por la doctora en Ingeniería estructural Claudia Germoso, quien lidera el Grupo de Investigación en Ingeniería Estructural y Sismo-Resistente del INTEC.
Otra investigación en ese campo, a cargo del doctor Kalil Erazo, estudiará la vulnerabilidad ante vientos extremos de las infraestructuras especiales, tales como edificios esbeltos de gran altura y puentes de grandes luces, con el objetivo de desarrollar una normativa que garantice la seguridad y el desempeño adecuado de este tipo de construcción. Tiene asignado un presupuesto de RD$9,433,308.
Erazo también investigará métodos probabilísticos robustos para el diagnóstico y predicción de daños estructurales en infraestructuras civiles sometidas a eventos extremos, especialmente terremotos y huracanes. Actualmente esas tareas son realizadas mediante inspecciones visuales, las cuales no tienen la precisión para detectar las fallas internas y los complejos mecanismos que causan el colapso de estructuras. El estudio recibió una asignación presupuestaria de RD$3,215,520.00.
Pasando a otra área, la bióloga Rosanna Carreras De León investigará el comportamiento de anidación y aspectos reproductivos de las especies de iguana endémica Cyclura ricordii y Cyclura Cornuta, con herramientas genéticas y ecológicas. Se enfocará en obtener un mejor entendimiento de los patrones de dispersión de los adultos en el área de anidación de Los Olivares, Pedernales, por medio de la telemetría de adultos.
La Hispaniola es la única isla caribeña con dos especies endémicas de iguanas, las cuales se encuentran en peligro de extinción por la continua destrucción de hábitat, comercio, caza ilegal y por la presencia de especies invasoras. La investigación fue aprobada por un monto de RD$8,080,160.00.
Con el objetivo de impulsar el desarrollo de competencias matemáticas de los estudiantes del segundo ciclo del nivel primario, la doctora Leandra Tapia trabajará en el diseño e implementación de un entorno virtual inmersivo de matemática lúdica digital adaptada a los procesos de enseñanza y aprendizaje de la matemática. El proyecto de investigación, que tiene asignados RD$8,162,000, se aplicaría en los centros educativos de Jornada Escolar Extendida del nivel primario, en un distrito educativo de Santo Domingo
Un estudio del doctor Javier García Maimó se propone extender las herramientas de la dinámica discreta para estudiar métodos iterativos con memoria, para así hacer posible el análisis de esquemas de ese tipo y su aplicación en problemas de interés. Tiene un presupuesto de RD$7,241,300.
En tanto, el doctor Santiago De Jesús Artidiello trabajará en el diseño de nuevos métodos iterativos con memoria para resolver ecuaciones y sistemas de ecuaciones no lineales, adaptar esquemas de alto orden diseñados inicialmente para ecuaciones o sistemas no lineales, para resolver ecuaciones matriciales y sus aplicaciones a problemas de ingeniería. Su presupuesto asignado es de RD$7,298,500. El doctor Luis Enrique Rodríguez de Francisco realizará estudios de variabilidad poblacional y respuesta a estreses de los pinos del género Juniperus, mediante una aproximación multiómica, con presupuesto de RD$12,587,633.