Si haces ejercicios y comes saludable, lo más probable es que utilices un smartwatch o una banda de fitness para dar seguimiento a esos esfuerzos.
Después de todo, el uso más común que se da a estos wearables es contar los pasos que damos en un día y las calorías quemadas.
Desafortunadamente, esos conteos no son tan precisos como quisiéramos pensar.
En efecto, se estima que estas mediciones presentan desvíos de entre 40 y 80 por ciento.
Según un equipo de la Universidad de Stanford, una medición más precisa se lograría con un wearable que se lleve en la pierna, pues ahí es donde se usa la mayoría de la energía en ejercicios como correr, caminar o montar bicicleta.
Después de esto, es posible que veamos wearables diseñados para ser llevados en las piernas.