Tras siete años de desarrollo, grandes expectativas y una recaudación de alrededor de 2.3 mil millones de dólares en base a esas mismas expectativas, Magic Leap finalmente puso a la venta su kit de realidad mixta, una tecnología que promete unificar los mundos físicos y virtual de una manera tan pareja que la integración sería imperceptible.
Impresionantes imágenes en las que un pequeño elefante rosado parecía caminar entre las manos o en las que una ballena repentinamente hacía acto de presencia desde las profundidades de una cancha de baloncesto fueron la carta de presentación de Magic Leap para dar a conocer el concepto de realidad mixta, que bien pudiera describirse como un híbrido entre realidad virtual y aumentada para fines de simplificación.
La idea de incorporar elementos virtuales a nuestro entorno físico y poder interactuar con ellos es una que nos viene fascinando desde hace décadas, siendo esta la razón por la que al día de hoy tanto la realidad virtual como la aumentada se cuentan entre las tendencias tecnológicas más importantes.
¿Qué ofrece la realidad mixta que no ofrezcan por su lado la virtual y la aumentada? Responder a esta pregunta es algo truculento porque la experiencia se resume en las ilusiones que va creando nuestro cerebro para interpretar esos elementos virtuales y unificarlos al mundo real de una manera que de la impresión de que siempre han estado ahí.
La realidad virtual lo que hace es transportarnos por vía de un casco especial a un mundo imaginario que no guarda relación nuestro entorno (un videojuego, por ejemplo) y la aumentada lo que hace es sobreponer elementos en nuestro campo de visión que se hacen presentes a través de una pantalla, sin necesidad de aditamentos adicionales. En realidad mixta Magic Leap unifica ambos conceptos, y el resultado es que en la sala de estar de nuestra casa bien pudieramos tener la presencia de un dinosaurio que actúa como si perteneciera al entorno, respetando espacios y dimensiones.
Para tener acceso a esta fascinante experiencia Magic Leap anunció a finales de 2017 su kit Magic Leap One, consistente en unas gafas (Lightwear), una computadora portátil inalámbrica de diseño circular (Lightpack) -diseñada para engancharse en un bolsillo- y un control remoto. Fue esto lo que hoy finalmente hizo acto de presencia en el mercado, haciéndose acompañar de un precio nada cómodo: 2,295 dólares.
En este punto del artículo la pregunta que surge es, ¿vale la pena invertir esa cantidad de dinero en una tecnología que a todas luces es emergente? Las primeras reseñas de sitios especializados como The Verge y CNBC en Estados Unidos coinciden en señalar que la realidad mixta es una tecnología que promete, con increíble potencial de aplicaciones futuras más allá de videojuegos y entretenimiento, pero, de momento al menos, todavía le falta camino por recorrer.
Es probable que la renderización de imágenes sea uno de esos puntos débiles que indican que la tecnología todavía no está en su punto. Todd Haselton, de CNBC, refiere además que Magic Leap no funciona del todo en condiciones de luz pobre o excesiva, aparte de que el campo de visión humana es por el momento una leve limitante que impide interactuar o ver objetos que estén demasiado cerca.
Aun así, se resalta que Magic Leap hace un excelente trabajo de integración al tomar en cuenta las dimensiones del espacio, algo que incluso incorpora en la generación de sonidos, los cuales son tridimensionales. Esta forma de trabajar la incorporación de elementos virtuales ha llevado a la compañía a sustituir el término “realidad mixta” por computación espacial, pero siendo el caso que se dieron a conocer así será difícil que caiga del todo en desuso.
Con el paso de los años, tal como ha ocurrido con la realidad virtual y aumentada, es de esperarse que la oferta de Magic Leap tan solo mejore. Ahora que el kit se ha hecho presente, disipando de paso la duda de muchos analistas que llegaron a definir a la compañía y su tecnología como “vaporware” o mucho aire caliente, es de esperarse igualmente que desarrolladores se interesen en trabajar con el concepto. Llegará entonces el momento en que se haga más asequible al público.
El objetivo de Magic Leap con su tecnología es eventualmente sustituir todas esas pantallas que usamos por un solo kit que lo integre todo. Sin duda, una visión fascinante y a la que daremos seguimiento por aquí.