¿Harto de las contraseñas? A nadie le gustan, y es por esa razón que tienden a reciclarse y ser tan fáciles de adivinar como 123456.
Aparte del lío que es memorizar múltiples contraseñas, hay también vagancia y falta de imaginación a la hora de crearlas.
Ambas situaciones quedan resueltas con servicios automáticos de generación y almacenamiento de contraseñas, tal como lo ofrecen iPhone y otros sistemas, pero siempre corremos el riesgo de que caigan en las manos equivocadas, y hasta luego.
Por estos puntos y más siempre se ha dicho que las contraseñas son un mecanismo de defensa muy flojo a la hora de evitar accesos foráneos a nuestros equipos y recursos digitales, y son varias las compañías que han abogado por su eliminación.
De las principales abanderadas de este movimiento es Microsoft, y tal parece que ha decidido abandonar ese mecanismo de una vez por todas.
Desde ya, con despliegue durante las próximas semanas, Microsoft estará ofreciendo alternativas de seguridad que no dependen de una contraseña, según se informó en el blog de seguridad de la compañía.
Estas opciones incluyen la descarga de la aplicación Microsoft Authenticator, que genera un código de duración efímera para acceso.
De igual forma se pueden elegir llaves de seguridad, códigos enviados al teléfono o cuenta de correo electrónico secundario y, por supuesto, Windows Hello, un mecanismo biométrico introducido en Windows 10 y que requiere del escaneo de la cara, el iris o la huella dactilar.
