¿Cómo te sientes hoy? ¿Contento? ¿Triste? ¿Algo desilusionado? La respuesta a esta pregunta variará según el contexto y el momento del día en que se plantee. Si estamos laborando en un ambiente algo estresante, la respuesta podría indicar inconformidad, mientras que, si estamos en un ambiente festivo, es muy posible que indiquemos estar felices.
Sí, el estado de ánimo depende de muchas cosas, y no es fijo a lo largo del día. Cualquier cosa, desde recibir una buena noticia hasta experimentar fallos en los equipos, puede hacer que pasemos de un estado a otro.
No hay forma de estar siempre contentos o tristes, sin embargo, una compañía inglesa, Moodbeam, cree tener la fórmula para ofrecer un diagnóstico en entornos laborales virtuales, un formato que con la pandemia no solo se volvió popular, sino que se ha establecido como la norma del momento.
A diferencia de esos wearables que andan por ahí repletos de sensores y tecnologías fascinantes, esta propuesta de Moodbeam no hace un rastreo del estado de ánimo, pues, con toda honestidad, eso no sería del todo posible. En vez de hacer falsas promesas, este gadget invita al empleado a pulsar un botón para indicar si está contento o triste. En la primera instancia, se presiona un botón amarillo. En la segunda, se presiona uno azul. Todo un clásico.
Una vez se selecciona una de estas dos opciones, el brazalete envía la respuesta a una aplicación móvil que, a su vez, ofrece al jefe un reporte de la situación emocional de su equipo.
Si bien esta idea pudiera ser interesante, sobre todo partiendo de la premisa de que la mayoría de la gente no desea expresar tristeza o inconformidad a su jefe usando palabras llanas, cabe preguntarse, ¿qué pasa después?
Producto de la pandemia, hay una percepción generalizada -avalada por diversos estudios- de que la depresión, la ansiedad y otras situaciones de carácter emocional han ido en aumento. Una herramienta como esta pudiera permitir diseñar planes de soporte a este nivel para los empleados, pero, ¿a cuántos jefes conocemos que le den la debida importancia a estos temas?
Una propuesta como Moodbeam, aun cuando pudiera lucir antojadiza y un tanto absurda, funcionaría mejor si forma parte de las herramientas y procesos del departamento de Recursos Humanos, pero aquí también hay que tener cuidado: ¿y si la cultura empresarial no da cabida a ese tipo de manifestaciones?
Moodbeam fue creado en 2016, inspirada por una joven estudiante que estaba pasando un mal rato con sus estudios. Como se ve, este brazalete no tiene un uso exclusivamente empresarial, lo cual nos lleva a pensar en otros posibles escenarios de uso. Aquí hay uno especialmente truculento: ¿cómo te sientes con tu matrimonio? Lo dejamos de tarea.
