Los televisores hace mucho que dejaron de ser aparatos exclusivamente para ver canales de noticias o películas: ahora son aparatos inteligentes que forman parte de la Internet de las Cosas (IoT) y que además están optimizados para sacar el máximo a los avances en gráficos que permiten una experiencia cada vez más inmersiva en videojuegos.
Así como ha evolucionado el concepto de estos aparatos, ocurre lo mismo a nivel de sus especificaciones, con diseños que con el tiempo se hacen más delgados y acoplados a los ambientes, con niveles de nitidez, brillo y saturación de color que se acercan a la perfección de la naturaleza.
Con este preámbulo pasamos entonces a la introducción de nuevos televisores LG al mercado dominicano que cumplen con estas características. Hablamos de la serie GX y CX, paneles OLED disponibles en tamaños de 77 y 65 pulgadas para la primera serie y en tamaños de 65 y 55 pulgadas para la segunda. Ambas líneas están optimizadas para 4K gracias a su procesador de tercera generación Alpha 9, el cual el cual aumenta la sensación de inmersión de los espectadores a través de nuevas funciones diseñadas para mejorar películas, deportes, juegos y otros tipos de contenido.
Los OLED de las líneas GX y CX de LG pertenecen a la familia ThinQ de electrodomésticos inteligentes de la compañía, y por tanto integran asistente de Google y Alexa (Amazon) para fines de IoT en el hogar.
La tecnología LG OLED está diseñada para ofrecer la experiencia de un cine en el hogar, optimizada por vía de Dolby Vision IQ, tecnología que ajusta el brillo del televisor según las condiciones de iluminación de la habitación. Otra funcionalidad, Filmmaker Mode, permite a cada uno de los modelos mencionados ofrecer el aspecto visual que los directores imaginaron a la hora de rodar sus películas. Tratándose de televisores inteligentes, hay asimismo acceso a aplicaciones como Apple TV, Disney+ y Netflix.
Para gamers, la nueva línea OLED de LG ofrece compatibilidad con NVIDIA G-SYNC para gráficos realmente inmersivos. Tiempo de respuesta ultrarrápido de un milisegundo, con un retraso de entrada (input lag) dos veces menor que otros televisores, ofrece por igual una de las experiencias más fluídas en ese segmento. En cuanto a sonido, parte importante de la experiencia gamer, estos televisores aprovechan la inteligencia artificial para afinarlos a través de AI Tuning.
El precio de estos televisores rondan entre 1,600 y 5,000 dólares. A nivel local, ya dependerá de las políticas de las tiendas autorizadas para su venta.