Para muchos emprendedores, tanto fuera como a nivel local, el crowdfunding es la mejor manera de lanzar sus ideas y tener la oportunidad de desarrollarlas a partir de fondos recaudados por esa vía. Aunque en República Dominicana el concepto es relativamente nuevo, hay evidencia de que su adopción va en aumento.
El caso local
El primer caso de crowdfunding como plataforma netamente local se vio con Jompéame, producto de uno de los Startup Weekend celebrados en el país y que recientemente se ha reenfocado para apoyar exclusivamente causas sociales. Un noble gesto, ¿pero que hay de los cientos o miles de emprendedores dominicanos?
Para estos queda la vía de plataformas extranjeras de crowdfunding como Kickstarter, donde recientemente se vio un caso de éxito dominicano con Passfort, un dispositivo portátil -similar a un llavero- que gestiona la entrada a cuentas online al sustituir todas esas claves por un simple código.
Por supuesto, una plataforma como Kickstarter solo hace sentido si se está pensando a gran escala y si el producto o idea presentada es tan buena como para llamar la atención entre las miles de propuestas que compiten por fondos entre los espectadores.
En un escenario como este, y sobre todo cuando se desarrollan productos para un mercado específico, plataformas locales podrían ser una mejor opción, aún cuando a futuro se tenga la idea de expandir los mercados. Con el ánimo de ofrecer una opción de crowdfunding a los emprendedores locales próximamente será lanzada en el país una nueva plataforma: Tengo Una Idea.
Tengo Una Idea
Todos tenemos ideas, y precisamente esta es la razón de ser del crowdfunding. El mercado local es sui generis para muchas cosas, y el emprendedurismo no es la excepción, por eso los fundadores de esta plataforma han hecho un estudio extensivo del mismo con resultados que se reflejan en su video introductorio y en el planteamiento de sus objetivos.
¿Alguna vez te has preguntado por qué el concepto de crowdfunding no está tan arraigado en el país? De entrada, no hay en República Dominicana una cultura de recaudar fondos con la ayuda de perfectos extraños para proyectos o situaciones que no sean de carácter social. El hecho de que Jompéame haya tomado recientemente esa dirección es un indicio de ello.
¿Qué podría hacer la diferencia en el caso de Tengo Una Idea? El conocimiento del mercado es vital, por eso cuando conversé con Jonathan Tavarez me refirió los engaños tipo TelexFREE como posible traba al tema del crowdfunding. Aunque se trata de cosas muy distintas, cualquiera que viva en la República Dominicana entiende de donde viene el temor. Es un asunto cultural y de desconocimiento a la vez.
Ya que crowdfunding no es un esquema para conseguir dinero fácil, Tavarez deja en claro que los proyectos sometidos a esta plataforma serán depurados con la finalidad de que los contribuyentes puedan contar con un producto real una vez finalicen las campañas y se ejecute el cronograma establecido. Después de todo, en Estados Unidos, donde el crowdfunding está bien establecido, ha habido par de escándalos por proyectos cuyos creadores simplemente se esfumaron. Eso es lo que se quiere evitar aquí.
Más allá del crowdfunding
Tengo Una Idea es una plataforma híbrida que va más allá del crowdfuding al facilitar la obtención de fondos a través de otras vías, entre ellas inversión privada y micro préstamos.
Aparte de estas opciones de recaudar fondos, la plataforma pone a disposición de los emprendedores experiencia y recursos para ayudar a desarrollar las ideas, formar una empresa y asesorar en su manejo y promoción.
En otras palabras, Tengo Una Idea, más que una plataforma de crowdfunding, es un acelerador para esas ideas que califican. Se trata de una iniciativa que va dirigida a todo emprendedor dominicano, sin importar su experiencia o educación.
Las otras plataformas que existen, como Kickstarter e Indiegogo, están más bien enfocadas a países desarrollados, siendo común el uso primario del idioma inglés. Esas características bien podrían ser una inconveniencia para emprendedores locales que quizás no dominan el inglés a la perfección y cuyos productos y soluciones van dirigidos expresamente a suplir necesidades del dominicano promedio.
Tengo Una Idea se apoya en PayPal y Banco Popular para gestionar los fondos. Aún una campaña recaude los fondos requeridos hay un último paso de verificación con el objetivo de que se dará un uso responsable a los mismos.
Para su lanzamiento Tengo Una Idea ha estado pre-clasificando proyectos y trabajando en una estrategia de comunicación enfocada a educar al público emprendedor y contribuyente de la manera más comprensiva posible. Desde esta página podrán enterarse de sus novedades, y por el momento pueden suscribirse aquí.
ACTUALIZACION ENERO 2017: la plataforma “Tengo Una Idea” funciona por membrecía y ofrece educacion, mentoría y asesoría para startups y empresas que necesitan actualizar sus procesos digitales. La plataforma está diseñada para conectar con otros emprendedores, mentores e inversionistas.