Todo empezó con unas invitaciones que llegaron a miles de usuarios de Google este martes con tal de participar de manera preliminar en lo que la compañía ha denominado Proyecto Google+, una red social que pretende corregir aquellos aspectos en que han fallado otras redes sociales, siendo Facebook la más notable de todas.
¿Y en qué cosa ha fallado Facebook? Se trata de un tema común a la experiencia social online: la privacidad, que al decir del propio fundador de Facebook está sobrevaluada. Si bien la misma gente que usa estos productos parece hacer caso omiso a las consecuencias de publicar toda su vida privada por ahí, han surgido escándalos que tienen mucho que ver con los controles de privacidad y seguridad que proveen las propias redes sociales, que en el caso de Facebook son bastante confusos.
Partiendo de la premisa de que la gente de todas maneras quiere algo de privacidad, Google ha diseñado una red social que permite compartir información con los contactos según su naturaleza. Para ello introduce el concepto de los círculos, contactos que se agrupan según categorías que el mismo usuario va creando. Si bien Facebook ofrece la facilidad de agrupar contactos según sus características, no se compara a la forma en que está estructurado en Google+.
La idea de los círculos ha caído bien, pues ciertamente hay gente que se abstiene de compartir fotos, videos y documentos porque no desea que esa información está a la vista de todos sus contactos. Otra característica de Google+ que ha llamado la atención de manera positiva es su video chat, llamado Hangout (Quedadas), y donde pueden participar hasta 10 personas a la vez.
Resulta un tanto curioso que Google haya basado su estrategia en el tema de la seguridad porque, al igual que Facebook, la compañía ha estado bajo fuego por ese tema. El incidente más reciente fue en mayo y tuvo que ver con teléfonos Android que guardaban información sensible acerca del paradero y los movimientos de sus usuarios.
La realidad es que esta movida de Google obedece a la experiencia negativa que tuvo la compañía con el lanzamiento de Buzz, un producto de corte social que sacó el año pasado, vinculado directamente al Gmail, y que fue ampliamente criticado por mostrar al mundo los contactos de correo de una persona. El tema candente era precisamente la privacidad, que en ese momento quedó en posición muy vulnerable.
Google+ es ciertamente un intento por hacer una red social más amigable, completa y privada, y quizás por ello – y por tratarse de un producto de Google– es que ya no hay más invitaciones disponibles. Al decir de Google, a las seis horas de haber iniciado la prueba, la demanda fue tan alta que hubo que paralizar el proceso hasta nuevo aviso.
¿Qué tan dispuesta estará la gente a dejar Facebook por Google+? Quizás ocurra como el Gmail, que por sus características innovadoras rápidamente acaparó usuarios. Después de todo, Google+ sincroniza con cada producto de Google, desde Gmail hasta Picasa, y eso puede ser una gran ventaja. Claro está, solo el tiempo dirá en qué para la cosa.
