¿A quién le creo? Días atrás, un exjefe de seguridad de Twitter denunció situaciones que parecerían justificar las razones que aduce Musk desde hace tiempo para salirse de la manida compra de la plataforma.
En una movida que probablemente nadie previó en Twitter, Peiter Zatko denunció ante la Comisión de Bolsa y Valores (SEC por su sigla en inglés), el Departamento de Justicia y la Comisión Federal de Comercio (FTC) de los Estados Unidos un conjunto de vulnerabilidades que ponen en riesgo tanto a la seguridad nacional de ese país como a la democracia misma.
Asimismo, esas vulnerabilidades ponen en riesgo a los 230 millones de usuarios activos por mes con que cuenta Twitter en la actualidad.
Zatko depositó sus denuncias el mes pasado, pero no fue hasta hasta unos días atrás que el Washington Post y CNN reportaron al respecto.
Entre otras cosas, Zatko, quien fue despedido en enero de este año tras haber ingresado a finales de 2020 a Twitter, señala el uso de software desactualizado y vulnerable en los servidores de la compañía. Asimismo, indica que miles de empleados tienen acceso indiscriminado y sin mucho rastreo a software clave de la empresa.
Aun cuando voceros de Twitter han calificado la denuncia de Zatko de oportunista y imprecisa, Musk se agarra de la situación para volver a justificar su decisión de salirse del acuerdo de compra anunciado en abril de este año.
Desde antes de anunciar su retirada de dicha compra, Musk hizo énfasis en la importancia de conocer la cantidad de bots y cuentas falsas activas en Twitter. Según alega, estos datos nunca fueron brindados, llevando a la situación que hoy conocemos.
La denuncia de Zatko no hace ningún favor a Twitter en un momento en que se halla en pleito legal contra Musk, siendo el objetivo forzar el cierre de la adquisición que de manera tan dramática incitó el propio Musk meses atrás.
De no alcanzarse un acuerdo entre Twitter y Musk, ambas partes se verán las caras en los tribunales de Delaware el próximo 17 de octubre.