Es posible que al momento de leer esta entrada todavía te encuentres trabajando desde tu casa por el tema de la pandemia, pero, aun si es el caso, es una realidad que poco a poco las cosas se van normalizando y dentro de unas semanas lo más probable es que ya estés laborando en tu oficina.
Partiendo de la premisa, este es el momento ideal para conocer un poco más de Heatbox, una lonchera que calienta la comida introducida en ella con vapor de agua, sin necesidad de electricidad, para un efecto práctico y saludable.
Heatbox es una innovación holandesa que a finales de 2019 estuvo llamando la atención en círculos de crowdfunding y de emprendedores por lo que el producto implica: una solución práctica al dilema que representa comer en la oficina -y cualquier otro sitio que no sea la casa o un restaurante- en lo que respecta a nutrición y comodidad.
Mucha gente resuelve su almuerzo en la oficina con una llamada al restaurante más cercano de comida rápida, con impacto directo sobre el bolsillo y la salud en el largo plazo, pues todos sabemos que esta no es la opción más saludable o ideal. Hay igualmente personas que llevan su almuerzo desde la casa, y si bien podría ser más saludable, hay retos a tomar en cuenta: dónde calentarla, el tiempo asignado para el almuerzo y la cantidad de personas con las que se comparte el espacio.
Heatbox resuelve estas cuestiones al no requerir de electricidad, pues funciona con una batería recargable de litio que al ser cargada por hora y media permite calentar tres veces. Al tratarse de vapor de agua, el resultado es un sabor más natural y agradable que el de la típica recalentada en un microondas y, lo mejor, no hay que buscar platos ni otros envases: todo se hace dentro de la lonchera.
Tal como nos comentaba Amit Jaura, cofundador de Heatbox, la lonchera está actualmente disponible para preorden en Indiegogo, donde puede comprarse por 129 euros (145 dólares aproximadamente). Si te interesa una, date prisa, pues al momento de este escrito solo quedan dos unidades disponibles, siendo esto una prueba de que el producto llama la atención porque resuelve una gran necesidad.
