A nadie le gusta hablar de cambio climático, aun cuando estamos sufriendo sus embates y los prospectos son más que negativos.
El humor es siempre una buena respuesta ante situaciones difíciles, y quizás por eso abrió días atrás en Leeds, Reino Unido, una taberna temporal con un curioso nombre: The Number Two.
Traducido al español como “La número dos”, es importante hacer constar que el nombre es intencional y encierra un sutil juego de palabras que hacen referencia a otro tema al que también somos reacios a discutir: desechos humanos generados a partir del proceso digestivo.
Pues bien. Resulta que, como muchas otras cosas que quizás nunca imaginamos, estos desperdicios pueden ser una fuente de energía cuando son sometidos a un procedimiento específico de tratamiento, y de ahí sale la genial idea de Yorkshire Water -la compañía de agua del condado al que pertenece Leeds en Reino Unido- de montar una taberna temporal (o pub, según la tradición inglesa) para educar al público en materia de sostenibilidad y, de paso, crear conciencia sobre el cambio climático y su impacto.
En la referida taberna tanto la calefacción como la electricidad requerida para su funcionamiento son provistos por aguas residuales tratadas para generar biogás, siendo este elemento el secreto de todo. Y como se trata de una iniciativa surgida del tratamiento y suministro de agua, The Number Two Tavern no sirve bebidas alcohólicas, sino que es solo agua.
Ya para terminar, un dato curioso: no solo pueden estos desechos ser una fuente de electricidad, sino que es posible extraer agua potable de allí. La idea es quizás algo revolucionara y no del todo apetecible, pero tal es la necesidad que enfrenta el mundo a futuro que hasta Bill Gates apoyaba la iniciativa hace unos años.
