Una de las tantas teorías de conspiración que circula en torno al COVID-19, el “nuevo Coronavirus” que nos tiene en estado de pandemia, es que el mismo es causado por la radiación asociada a las redes 5G, el estándar de telecomunicaciones que poco a poco empezó a implementarse en varias ciudades del mundo en 2019.
5G, para quienes no lo recuerdan o no están familiarizados, promete estabilidad y velocidad a niveles que soportarían no solo la explosión de conexiones IoT (Internet de las cosas) que vive el mundo, sino también comunicaciones holográficas y otros procesos intensivos en ese sentido.
¿De donde sale la idea de que 5G guarda relación con el coronavirus? Se ha difundido ampliamente la versión de que Wuhan fue la primera ciudad china en desplegar 5G en su totalidad. No hay evidencia que soporte el hecho, pero sí es cierto que hay 5G allí y que los propios residentes -según dejaron entrever videos que han sido sacados de circulación- echan la culpa al encendido de la red de la crisis de salud que eventualmente sobrevino.
A lo largo de 2019 hubo denuncias respecto a los efectos nocivos del 5G sobre la salud de la gente, siendo un factor de importancia el hecho de que la red implica la instalación de numerosas antenas de radio muy cercanas entre sí. Varios médicos de hecho fueron ante el congreso estadounidense a exponer el tema, pero nunca trascendió más allá.
La idea de que 5G es el culpable del COVID19 no resulta exclusiva al circuito de teorías de conspiración, sino que hay científicos que no descartan un vínculo. Uno de ellos es el doctor Thomas Cowan, quien habló del tema en Arizona durante una cumbre de salud y derechos humanos realizada el 12 de marzo en Arizona. El video de su intervención ha sido eliminado de YouTube por “violar políticas”. El doctor en cuestión se halla bajo investigación.
En respuesta a esas teorías de conspiración, y por el hecho de que la desinformación en torno a coronavirus ha estado a la orden del día y organismos como la OMS han perdido credibilidad, residentes en Reino Unido y China han estado quemando y tumbando torres 5G.
Ahora, después de más de un mes circulando libremente, Facebook, Google, YouTube y otros han empezado a censurar estos contenidos, tan solo avivando la especulación.